miércoles, 5 de octubre de 2016

Torturando que es gerundio.

     Hola a todos y a todas. Empezamos flojito con la temporada de Halloween, hoy traigo una entrada un tanto sanguinaria y morbosa. Me resulta bastante gracioso decir esto cuando creo que de momento no tengo ninguna entrada que no lo sea (equisdé). Sobra decir que esto es algo subjetivo, ya que hablaré de aquellos que me hayan llamado la atención a mi. Recalco que son métodos de tortura, no armas ni métodos de muerte, como la silla eléctrica o la guillotina, (aunque de la mayoría no salieses vivo). Dicho esto, comencemos.

La cuna de Judas: 
    Durante la época Medieval, este era uno de las torturas nás perturbadoras que existieron. En él, la víctima estaba atada y se le iba descendiendo sobre una pirámide que tenía una punta bastante afilada. (Pa' mear y no echar gota).
    La silla china de tortura:
     Se utilizaba para interrogar a todo aquel que hubiese cometido un delito en la China del siglo XIX. Era una silla cubierta de cuchillas y pinchos, a la que te ataban y te proporcionaba una muerte lenta y bastante dolorosa. De todas formas, hoy en día,  los expertos creen que seguramente se presentaba más bien como símbolo de poder que como método de tortura, pero ya el imaginar cómo funcionaba, me pone los pelos de punta. 
    El potro: 
     Creo que esta es de las más conocidas, ha sido representada en muchas series y pelis de hoy en día. En ella, el torturado era atado por tobillos y muñecas. Se hacían girar las ruedas, que tiraban de estas partes para así desmembrarlo. Fue uno de los métodos más usados durante la Inquisición. 
    La gota china:
      Este era un método de tortura psicológica. Se colocaba encima un continuo chorro de agua que caía sobre la frente de la persona durante un largo periodo de tiempo en la misma zona de la piel. La víctima entraba en locura, le provocaba insomnio y también heridas en la piel.
    La rueda:
      Otro instrumento medieval. En él, se ataba al torturado a una rueda. Mientras se le hacía girar, era golpeado con un martillo gigante de hiero. A la gente le chiflaba esto, y a veces iban a verlo como  espectáculo, ¿por qué no?
      La tortura del agua: 
      Se ataba a la persona con alambre de espino en las muñecas y tobillos, y se le tapaba la boca con trapos para que no pudiese vomitar. Más tarde se le introduciría agua por las fosas nasales hasta que el estómago estuviese lleno de agua y a punto de explotar. Los torturadores empezarían a saltar encima de su estómago o a darle patadas hasta que explotase y por lo tanto muriese, y así, queridos amigos, es como se inventaron las camas elásticas. Una variante menos cruel de esta tortura consistía en alimentarlo solamente con productos salados y agua sucia (por aquello de que lo salado te produce sed). Este me ha llamado mucho la atención, porque nunca antes había escuchado hablar de él.
   El aplastacabezas:
    También llamado por mi como "El gorrocóptero" (cuando veais la imágenes y si veis/conocéis Doraemon, entenderéis el por qué). Con ese nombre ya se puede saber cual era su función. En la barra inferior se colocaba la barbilla del torturado y el casco era empujado hacia abajo con el tornillo. Primero se rompía la mandíbula  y luego el cerebro que salía por las cavidades de los ojos :) En la actualidad, en gran parte del mundo se sigue utilizando en algunos interrogatorios.
    La cuna:
     Creo que esta es de mis preferidas (entendedme cuando digo preferidas, por favor). Yo no sé qué tiene esto de cuna, aunque tampoco la de Judas, pero bueno, y es que esta es una variante de la otra. Pero esta, en vez de ser una pirámide, era un potro terminado en pico y con una hoja de metal afilada. Se ponía a la víctima sentada con el ojete encajado en la hoja cortante y además se le ponía una bola pesada atada a los tobillos para así hacer más peso y por lo tanto, para que se desgarrase antes. La muerte solía ser por desangramiento, pero si tenías suerte, solamente acababas con alguna extremidad amputada. Aún así, me da que las mujeres lo teníamos algo más fácil con este método.
    La pera vaginal:
      Muy utilizado durante la Edad Media en mujeres acusadas de haber mantenido relaciones con Satanás o con alguno de sus familiares, por que, ¿qué mujer no ha tenido relaciones con Satanás? Consistía en un objeto metálico con forma de pera que se introducía en la vagina de la condenada y una vez introducido, por medio de un tornillo, se desplegaban unas cuchillas hasta su máxima apertura. Podéis imaginaros lo que esto provocaba. Desgarros en el útero y un dolor muy insoportable, del que muy pocas mujeres lograban sobrevivir. Posteriormente aparecieron dos variantes de este terrible instrumento, la pera oral y la pera rectal. La primera se introducía en la boca de herejes y seglares, y la segunda en el recto de homosexuales. No sé por qué se empeñaban en decorar este objeto del demonio, si visto a simple vista y sin saber su función parece hasta bonito.
       Purificación del alma:
          Como creo que ya bastante dolor psicológico os he causado describiendoos algunas, para finalizar esta entrada voy a hablar de una no tan sangrienta (no he podido encontrar imagen). En muchos países católicos, el clero creía que se podía purificar el alma haciendo beber o ingerir agua hirviendo, carbón o ambas cosas a la vez. Esta tortura se utilizaba después de que el acusado hubiese confesado su herejía, cosa muy común en esta época tras haber sido anteriormente torturado y antes de ser ejecutado en otros tantos casos.

       Espero que hayáis podido aguantar leyéndolo todo hasta el final (no os deseo el mal, ojo). Yo creo que las personas que inventaron estos juguetitos deberían haberlos probado antes ellos, para ver si funcionaban, porque tela. Una vez más, me despido de vosotros con un fuerte abrazo que os rompa todos los huesos, y un beso muy fuerte que os devore media cara. Hasta pronto. Sed buenos. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario